Quizás sea este el verdadero secreto que debemos conocer lxs intérpretxs escénicxs. Bueno, sí, son varios los conocimientos que vamos descubriendo. Pero es que el verdadero multitasking lo inventaron quienes se suben al escenario.Pero ojo, no hablo de multitasking que traiga dispersión, que abandona una acción por hacer otra. No se trata de un capricho o de falta de foco. Al contrario. Trabajamos el multifoco. La convivencia de emociones, estados, decisiones, percepciones, y con todo eso, podemos tomar decisiones (¡vaya virtud, ¿no?!).
Puede ser, a veces un poco abrumador, entrenar esta capacidad. Pero el objetivo, justamente, es no abandonar nada de todo eso que se va encapando en la escena, sino acumularlo y que se convierta en el real puente de las acciones.
Así, realizar una acción escénica, ya sea física o vocal, no será simplemente una forma vacía, movimientos sin sentido, será una expresión de todo ese universo construido.
Y, qué decirles, la verdad que es maravillosa la transformación que puede traer a nivel personal. Lejos de querer correrme del ámbito profesional, sí deseo compartirles que como seres que trabajamos con las emociones, la observación, la humanidad puesta en un texto o una coreografía, acercarnos a esta complejidad en escena, nos abre un mundo de compresión de la complejidad de la vida en otro nivel.Por supuesto, que esto no se da solo, y que cada quien puede hacer con esta información un bollito y tirarla a la basura, o abrir un camino de preguntas. A mí, siempre me pasa lo segundo. El teatro y la danza me ayudan a comprender la vida. Me permiten verla ahí, puesta en juego, con sus entramados más incomprensibles, con todo lo que a veces las palabras no llegan a nombrar pero que los cuerpos emanan, el diálogo de impulsos que recorre una acción, una emoción o un pensamiento.
Reflexiono, una y otra vez, qué regalo poder acceder a esta cara del prisma, verlo en mi yo intérprete o como espectadora.
Y sin duda, trabajar en diálogo con estas reflexiones, permiten que mi yo actriz/performer crezca, que se profundice y que se expanda.
Porque a fin de cuentas, vamos conociendo los secretos de la vida misma, y buscamos formas y artilugios para ponerlas en juego. Para hablar con otres, a través de los sentidos, de todo lo que nos sucede cuando estamos vivos.